Sabores a medida. La historia de Nadia y Fer

Introducción:

Entre los murmullos de la naturaleza y el susurro de los árboles, Nadia y Fer trazaron el boceto de su boda ideal con casi un año de antelación. Lo que nos presentaron fue una visión tan vívida y detallada que capturó nuestros corazones desde el primer momento.

La Visión:

Desde su primer visita, quedó claro que Nadia y Fer no eran una pareja ordinaria. Con ideas claras y un sueño compartido, nos desafiaron a ir más allá de lo convencional, especialmente cuando llegó el momento de hablar sobre el menú. Su entusiasmo era contagioso, y nos sumergimos en la aventura de hacer realidad sus deseos culinarios.

La Ceremonia:

El “bosquecito” de Gotas de Luna se convirtió en el escenario donde intercambiaron sus votos. Bajo un arco rústico adornado con tela blanca y follaje, ellos hicieron sus votos. Los atuendos de los novios, tan únicos como su amor, añadieron magia al momento, creando una escena sacada de un cuento de hadas.

La Recepción:

Bajo la carpa alta de nuestro jardín, 110 amigos y familiares celebraron el amor en una templada noche de enero. La ausencia de lluvia fue un regalo del destino, permitiendo que la fiesta floreciera bajo estrellas invisibles, envueltas en la calidez de risas y bailes.

Un Menú Sin Igual:

Al adentrarnos en el corazón de la planificación de la boda, nos encontramos ante un desafío tan delicioso como exigente: obtener el menú resonara con la historia y los deseos de los novios. Lo que siguió fue una odisea culinaria que nos llevaría desde Oaxaca hasta Villahermosa.

La Salsa de Chicatana: Una Misión de Sabor

La primera parada en nuestra aventura gastronómica fue la búsqueda de la salsa de chicatana perfecta. Nadia y Fer soñaban con darle a sus invitados una probada de este manjar único, lleno de sabor y tradición. Nos sumergimos en el mundo de las chicatanas, probando más de seis variantes diferentes de esta preciada salsa. Cada degustación fue una revelación, un viaje por los sabores auténticos de Oaxaca, hasta que finalmente encontramos la salsa que tenía el equilibrio perfecto de sabor y picor que ellos buscaban. Fue un viaje de descubrimiento, uno que nos recordó la riqueza de los ingredientes mexicanos y la importancia de cada detalle en la creación de experiencias memorables.

Como primer platillo servimos unos elotitos, bañados en una crema con salsa de chicatana y queso, esto para evocar a un viaje que Nadia y Fer tuvieron en el que probaron este platillo y que les traía recuerdos que querían tener presentes en este día.

La Cochinita Pibil: Un Viaje al pasado

Para el plato fuerte, soñaban con deleitar a sus invitados con una auténtica cochinita pibil al estilo yucateco, un platillo que para Fer iba más allá de una simple elección gastronómica; era el eco de un recuerdo, una tradición que deseaba compartir en su gran día.

Fer tenía en mente una versión muy específica de este platillo, preparada por un experto en Yucatán ahora residente en Villahermosa, Tabasco. Su cochinita pibil, conocida por su autenticidad y sabor, era la que Fer quería en su boda. La cochinita emprendió un viaje, cruzando kilómetros para llegar a nuestro salón, para ser emplatada y servida por nuestro equipo, trayendo consigo no solo los intensos sabores de Yucatán sino también un trozo de la historia personal de Fer.

Tartas de Queso: El Dulce Final

Y para cerrar, servimos tartas de queso con frutos rojos, un clásico reinventado que envolvió el final de la velada en notas dulces y frescas.

Decoración y Ambiente:

La paleta de colores terracota y beige, mesas de madera, sillas doradas y la ausencia de flores a favor del follaje.

La Fiesta Continúa: Tornaboda

Al día siguiente, la celebración no había terminado. En Gotas de Luna, entendemos que algunas historias merecen más de un capítulo, y para nuestros queridos novios, preparamos una Tornaboda.

El menú del día era una promesa de reconfortante tradición: tacos de barbacoa de borrego acompañados de un consomé calientito, cada uno preparado para despertar los sentidos y calentar el corazón.

La elección de Nadia y Fer por una cerveza de barril artesanal fue un acierto total. La combinación de esta cerveza con la barbacoa de borrego tuvo una gran aceptación.

Esta reunión fue no sólo un momento para recuperarse de la noche anterior, sino como otra oportunidad para celebrar su unión.

Esta Boda fue un viaje de sabores personalizados y recuerdos, para que ellos pudieran compartir la esencia de su amor con quienes más quieren.

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